Defectos que antes podían pasar inadvertidos, ahora son el foco de todas las miradas, debido a que tenemos que llevar mascarilla y comunicamos a través de los ojos. La cuestión es acertar con un tratamiento que solucione todos nuestros problemas de manera global.
En la zona del contorno de los ojos se concentran varios males: arrugas (patas de gallo), bolsas y ojeras. Y surge la duda razonable de si debemos utilizar un cosmético para cada problema o podemos utilizar uno que lo haga todo. Porque si realmente cada signo requiere un cosmético específico, muchas tendríamos que utilizar mínimo tres para esta zona, y eso supone disponer de tiempo y dinero. Vamos a empezar por entender por qué aparece cada uno de ellos.
Las huellas de la edad
Las patas de gallo son el primer signo de la edad y aparecen en el contorno de los ojos debido a que «la piel es hasta cinco veces más fina que en el resto del rostro». Así nos lo explica Esther Puig, del departamento de I + D de Henkel Beauty Care, que añade que suelen surgir «entorno a los 25 años en las pieles secas, y alrededor de los 30 en las normales o grasas”,
Por su parte, la culpable detrás de las bolsas de agua que surgen debajo de los párpados inferiores es la retención de líquidos. Esta retención la producen, recuerda Puig, «una alimentación rica en sal, el estrés o una falta de descanso adecuado (no dormir las horas suficientes o hacerlo de forma interrumpida). Y son más comunes en la edad adulta”.
«Piel fina, mala circulación sanguínea y linfática, y reabsorción de la grasa parecen estar en el origen de los problemas que se concentran en el área periocular»
Y en cuánto a las ojeras, hay varias causas y tipos (pigmentadas, vasculares y por hundimiento). Las pigmentadas, que son de color marrón, se producen por un exceso de melanina (pigmento que da color a la piel), por causas genéticas, por un exceso de sol o por tomar determinados medicamentos. Cuando son vasculares presentan un color morado o rojizo. “Están asociadas a personas con mala circulación y acumulación de sangre en la zona, y se producen cuando la piel es fina y se transparentan los vasos capilares”, describe esta experta. Y es habitual en estos casos que aparezca un hundimiento o depresión. “El hundimiento suele ser una característica genética en el que la forma del rostro ya tiene ese hundimiento pero al aparecer la ojera marcada este hundimiento se acentúa”, apunta Esther Puig.
Uno para todos y todos…
Piel fina, mala circulación sanguínea y linfática, y reabsorción de la grasa parecen estar en el origen de los problemas que se concentran en el área periocular. Precisamente, “los contornos de ojos atacan estos tres signos de la edad y están específicamente formulados para ello”, asegura la experta de Henkel Beauty Care. Lo importante, continúa la experta, es que nuestro contorno sea un producto anti-edad global, esté testado dermatológicamente y tenga una eficacia demostrada, como el Contorno de Ojos Anti-edad Lift + Botology (PVPR 9,95€), de Diadermine.
Este cosmético contiene ingredientes diana como la eufrasia, “un extracto vegetal específico para ayudar a reducir bolsas y disminuir los signos de fatiga de esta zona”, según Puig.
«La gama anti-edad Lift+ Botology alisa las líneas de expresión, reduce arrugas, reafirma la piel, previniendo su envejecimiento acelerado y aportando un aspecto más fresco y joven»
Otro activo presente en este contorno es la cafeína, que es sobradamente conocida por activar la microcirculación. “Atenúa las bolsas, reduce la hinchazón y las ojeras que son provocadas por una mala alimentación, el estrés o la falta de descanso”, incide esta experta. Y hay más activos naturales que completan la fórmula de este contorno para convertirlo en un contorno “redondo” por su acción global, como son el hialurón vegetal, que evita la pérdida transepidérmica de agua, el té verde y el té negro fermentado, ambos de acción antioxidante y antiarrugas, o el paracress, que proporciona una acción alisadora y reafirmante.
Este contorno pertenece a la gama anti-edad Lift + Botology de Diadermine, que también integra el Sérum Anti-edad y las cremas de día y noche Lift + Botology. Formulada con un 92% de ingredientes de origen natural, Lift+ Botology alisa las líneas de expresión, reduce arrugas, reafirma la piel, previniendo su envejecimiento acelerado y aportando un aspecto más fresco y joven.
La mejor rutina para una mirada despierta
Tan importante es acertar en la elección del contorno de ojos como saber elegir cuándo y cómo dárselo. “Lo idóneo son dos veces al día después de limpiar la piel y antes de aplicarse el sérum o la crema de día o noche”, recomienda Esther Puig. ¿Cómo hay que aplicarlo? Cogemos una gotita de producto, el equivalente a un grano de arroz, y con la yema de los dedos índice y corazón la tecleteamos desde el lagrimal hasta las patas de gallo. Siempre de dentro hacia afuera y sin arrastrar el producto.
Si somos constantes y repetimos este ritual, “podemos ver resultados inmediatos en las patas de gallo y las líneas de expresión, y disfrutar de un aspecto menos cansado y más fresco. En las ojeras y las bolsas los resultados se hacen esperar un poco más. “Los estudios desarrollados con los cosméticos arrojan datos a partir de los 28 días”, asegura la experta del departamento de I + D de Henkel Beauty Care.
Importante, eso sí, no debemos olvidarnos de limpiar bien la delicada piel de esta zona. “Ahora, con el uso de la mascarilla, se hace aún más relevante la limpieza facial para eliminar impurezas y cuidar el contorno de los ojos, ya que intentamos transmitir más emociones con la mirada”, apunta la experta. Eso sí, no vale cualquier desmaquillante, tiene que ser uno específico para esta delicada área. “No sirve el producto que utilizamos para limpiar el rostro porque la de los ojos es una piel muy fina y sensible y se podría irritar. Tiene que estar testado oftalmológicamente y hay que evitar frotar o estirar en exceso”, aconseja. El Desmaquillante de Ojos (PVPR 4,65€), de Diadermine, contiene provitamina B5, elimina el maquillaje de manera eficaz, incluso el waterproof, sin irritar la piel y respeta su pH.
Y algo más, como nos han recordado tanto durante los últimos meses, hay que procurar elegir mascarillas que no opriman el párpado inferior, ya que esto podría dificultar la circulación venosa y linfática y producir más edema (bolsa de agua), utilizar gafas de ver con cristales que impidan los dañinos efectos de la luz azul (de ordenadores, móviles y tablets), y gafas de sol con monturas que no sean metálicas, ya que éstas reflejan más la luz del sol sobre la zona de ojera y promueven su aparición en personas propensas a las manchas.
Imágenes: Diadermine e iStock/CentralITAlliance
